jueves, 6 de febrero de 2014

JESÚS POEMA, MARÍA POETA

Quisiera empezar con la inmediata pregunta: ¿A veces no te rasca la cabeza? Si tu respuesta es sí, pues tenemos algo en común. En mi caso me rasca muchas veces cuando intento razonar algo, entender algo, inventar algo; y pues yo creo que Dios se la rasco bastante. Se la rasco en el sentido de que quería traer a su hijo a este planeta usando las mejores circunstancias, un pesebre, lugar de pastores, de reyes, pero sobretodo como fruto de una virgen.



Dice la oración “…bendito es el fruto de tu vientre Jesús…(Lc. 1, 42)”; el fruto del embarazo de María fue Jesús. Los árboles dan frutos; es por el árbol, su tronco, las ramas, las hojas…….que los frutos son saludables…ricos, jugosos. ¿Cómo no acercarse al árbol (María) para dar el fruto de Jesús?

Si Dios eligió a María para que naciera Jesús, ¿cómo negarnos a su elección para que el salvador nazca en nuestros corazones?, es ella la que nos puede ayudar a alimentarnos bien para que el niño crezca sano y fuerte, es ella la que nos puede ayudar a saber con las pataditas que está queriendo pedir el niño, es ella la que nos puede ir ayudando a ganar amor a lo sencillo, al forje de la vida gradual, es ella, ella es, es la madre, no una madre, ¡sino… LA madre!, es la mujer, no una mujer, ¡LA… mujer!.

Las frases que aparezcan a en los siguientes párrafos entre dos símbolos slash fueron extractadas del libro Las Glorias de María de San Alfonso María de Ligorio, fueron las que más me gustaron. /--------------------/
Seguimos. Haber. La gracia en la vida es ser como Jesús, ¿o no?, no hay nadie con todas sus cualidades en el planeta tierra, no ve que era el hijo de Dios, es lógico, es obvio; mansos, amorosos, tiernos, misericordiosos, todas sus virtudes, no hay nadie como él, ni Buda, ni Gandhi, ni nadie. Pues hay que acudir a la intercesión de sus papas en términos de eficiencia  /La intercesión de María no solo es útil, sino necesaria/. A Cristo por María. 

Podemos ir en dirección al cielo a la velocidad de la luz o a la velocidad de un auto de carreras, o en una chalupa; tú decides, elige bien, siéntete hijo de María, búscala, que ella te enseña cómo amar a Jesús /Hasta los mismos serafines podían bajar del cielo para aprender en el corazón de María como amar a Dios/.

Dios ha hablado de distintas formas durante toda la existencia de la humanidad, desde el edén,  la tierra de la esclavitud, la libertad, los patriarcas, los profetas, Isaías, Juan bautista, y luego llegó Jesús. El mismo Dios quiso mostrarnos como es que nos debemos comportar, cual es el sentido de la vida, mandando a su propio hijo para que con su ejemplo nos mostrara cómo es el quid de la vida. Ahora, para aquellos que llevamos ya un tiempo tratando de conocer más de Dios y de cumplir con lo que nos pide, que es que lo amemos a él con todas las fuerzas, el corazón, la mente, el cuerpo; y amar a los demás como a nosotros mismos, hay una clave, un atajo exorbitante, archirebueno, archirecontrahipermega espectacular  /Tan unida estuvo a Dios por el amor, dice el santo, que no es posible lo esté más ninguna otra criatura/.

Si la premisa que debemos poner en práctica es amar, hagámoslo………….ohhh, pero eh ahí el problema, cuesta bastante, no fluye mucho, queriendo hacer el bien hago el mal que no quiero (Rm. 7, 19-20); pues si es así, una vez mas, te lo escribo, la intención es convencerte, interpelarte……….acudamos a los duros que pudieron estar más cerca de Jesús, que más se parecieron a él, a la que más se pareció a él.

María fue la que acuño a Dios en su hermoso estómago, su bello vientre; lo gesto, 9 meses, lo cuido, cuidándose,  lo alimentó, alimentándose bien; no solo era comida nutritiva, era sobretodo el alimento espiritual, a ella sí que le fluía eso, no por nada Dios le manda a decir “llena de gracia” (Lc. 1, 28); con su prima se fueron de retiro, y no cualquiera, sino uno bien larguitoooo, de 3 meses queridos amigos, ahí les comento el dato (Lc. 1, 39-45).

Una frase que me deja bastante perplejo: “Carne de Jesús, Carne de María; sangre de Jesús, sangre de María”, nos indica lo que se viene diciendo, que donde esta Jesús está María, donde está María está Jesús. /La crucifica dio a luz al crucificado/ (Lc. 2, 35).

Es que a veces me pongo a pensar y de verdad, María fue la que estuvo de p a pa con Jesús, desde la concepción hasta su muerte, y ahí, ahí estaba, quien mejor que ella para hacernos entender la pasión de Jesús; ella tampoco lo entendía a plenitud, como se repite varias veces  en el evangelio meditaba todo en su corazón (Lc. 2, 19; Lc. 2, 51), pero persistió, se mantuvo; perseveremos con ella, si tenemos dudas, confusiones, contémoselas a ella.

Si Dios tuvo madre, y Jesús vino a decirnos que Dios es nuestro padre, ¿cómo no va a ser María nuestra madre también, aparte de la de Jesús?, Jesús nos la regaló así, como una madrecita, como una mamita (Jn. 19, 25-27) /Esta es su voluntad, que todo lo obtengamos por María, que la honremos/.

Mi experiencia con mi mama, la biológica, la de la tierrita ha sido de muchísima confianza, de seguridad, de apoyo, de eso que uno se pelea pero igual ahí está ese amor, ese respaldo por encima de todo, de guía, de criar, de recriar, y de volver a criar, de corregir, de policía, de escucha, de consejera, de enseñante, de educadora, de proveedora, de previsora, todo eso, y mucho más, entonces si una madre buena aquí en la tierra puede llegar a ser así de virtuosa, pues como no acogerse a la madre de las madres, a la mujer de las mujeres, a la Madre María. Hay muchos que no hemos abierto el regalo de Jesús, el regalo de su madre, lo tenemos empacado, envuelto, rompamos el empaque, con anhelo, con pasión, que se dañe el papel, y encontremos rápidamente a María, la virgen, la pura, la que trajo la alegría al mundo, la luz  /Ella tiene más ansias de darnos gracias; que nosotros de recibirlas de ella/.

Es más,  no has notado el detalle de que entre más se pudiera sentir felicitada, ella desde el principio más se apequeñaba y redirigirá toda la gloria todita toda a Dios, que interesante, ¡eh?.  (LC. 1, 46-55; Jn.2, 5) /Cuanto más se veía enriquecida, más se humillaba recordando que todo era don de Dios. Cuanto más puro es un corazón, y más vació de sí mismo, tanto más estará lleno de amor de Dios./


 En conclusión, con base a mi experiencia con ella y de la lectura del libro de San Alfonso:

Si Jesús es la sonrisa, María es la boca; si Jesús es el delantero, María es la volante creativa; si Jesús es el chiste, el alegre, María es la chistosa, la cuenta chistes, la animadora; SI JESÚS ES EL POEMA MÁS BELLO JAMÁS DECLAMADO, MARÍA ES LA POETA QUE CON SU DULCE ESENCIA NOS ENTONA EL VERBO.
Para terminar, una poesía muy hermosa de Yuan Fuei Liao. Dice así:


Dios:

¿La Virgen de la Merced
o la Guadalupe?
¿La Reina de la Paz
o la Rosa Mística?
¿Nuestra Señora del Sagrado Corazón
o Perpetuo Socorro?
¿Auxilio de los Cristianos
o Estrella de la Mañana?
Todas son una sola:
María de Nazaret,
la sencilla,
la pequeña,
la simple aldeana
que de su ropero entresaca
el vestido para cada alma.

La Virgen con su amplio vestuario,
y yo con mi vasto bestiario.
Ella, la dama;
yo, el vagabundo.
Ella, la bella;
yo, la bestia

redimido por el fruto de sus entra
ñas;
sin m
ás lejanías extrañas,
vuelvo a entonar sus letan
ías:

Nuestra Se
ñora de los Tenis Rotos,
Virgen del Jeans,
Reina de Belleza,
Reina del Pop,
Reina de Corazones,
Reina de Diamantes,
Reina de Picas,
Reina de Tréboles,
Reina del Tablero,
Estrella de Cine,
Estrella de Grandes Ligas,
Jugadora Estrella,
Primera Dama,
Top Model,
Megadiva,
Miss Universo,
Mejor Actriz Principal,
Mujer Maravilla,
Supermamá,
Célula Madre,
Alma Mater,
Mater Magíster,
Doctora Honoris Causa,
Salón de la Fama,
VIP,
Auxiliadora de los no considerados VIP,
Socorro de los frenados por: "Nos reservamos el derecho de admisión",

Medalla de Oro,
Premio Mayor,
Premio Nóbel del Amor,
¡ruega por nosotros!

Amén
se-los-unos-a-los-otros.